Bandera de Rumanía en movimiento
CONOCE RUMANÍA

HIDROMETEOROS
     DESCRIPCIÓN


Formados por la modificación del vapor de agua en suspensión en la atmósfera Depositados sobre objetos en la superficie terrestre Partículas levantadas de la superficie terrestre por el viento Partículas que caen libremente en el seno de la atmósfera sin llegar al suelo Partículas que caen por la atmósfera y alcanzan la superficie terrestre
Niebla en las proximidades del observatorio de Sort, Lérida; autor Ramón Baylina. Detalle de las gotitas que forman el rocío; autor Fernando Llorente Martínez. Ventisca en la Antártida, de la página www.inach.cl/portal_educa/antartica/clima.html. Virga; autor Hose Antonio Quirantes. Chubasco sobre Coslada, Madrid, autor Francisco José Rodriguez.
Niebla
Neblina
Rocío
Escarcha
Helada
Cencellada
Rociones
Ventisca
Virga Lluvia
Llovizna
Nevada
Granizo
Chubasco
Nieve granulada
Cinarra
Prismas de hielo
Lluvia o llovizna helada


Formados por la modificación del vapor de agua en suspensión en la atmósfera

Son los meteoros formados por partículas muy pequeñas de agua o de hielo que se encuentran en supensión en la atmósfera y que dificultan notablemente la visión. A este grupo pertenecen:

I) La niebla: Hidrometeoro formado por gotas de agua muy pequeñas, que pueden verse a simple vista, y que reducen la visibilidad horizontal por debajo de un kilómetro. Se produce principalmente en otoño e invierno y casi nunca en verano.

La intensidad de la niebla se gradúa por la distancia de la visibilidad horizontal. Existen tres grados, así diremos que una niebla es débil cuando lo que se vé esté comprendido entre los 500 y los 1.000 metros; será moderada para distancias entre los 50 y los 500 metros y densa cuando la visibilidad sea inferior a lso 50 metros.

II) La neblina: Hidrometeoro formado por gotas de agua microscópicas que reducen la visibilidad entre 1 y 10 kilómetros con una humedad relativa superior al 80%. También es conocido con el nombre de bruma. Es un fenómeno meteorológico muy habitual en cualquier momento del año, aunque en los meses de verano se da en muy contadas ocasiones.

Regresa al menú rápido de hidrometeoros


Depositados sobre objetos en la superficie terrestre

Son meteoros que se producen cuando el vapor de agua atmosférico se condensa sobre objetos que se encuentran en el suelo. De esta manera se forman los siguientes:

I) Rocío: El depósito está formado por gotitas de agua. Se produce con humedades comprendidas entre el 80 y el 100%, según temperaturas. Es típico del otoño y de la primavera, raro en el invierno, por ser las temperaturas muy bajas y casi no se produce en el verano (ambiente muy seco y temperaturas excesivamente altas). Se observa principalmente al amanecer, después de noches despejadas y de poco viento y es mas frecuente en los lugares bajos y llanos que en las cumbres o en las laderas montañosas.

Físicamente, este meteoro se produce cuando un objeto en la superficie terrestre se enfría por debajo de la temperatura de condensación de la capa de aire cercana a él, que por tanto no puede contener tanto vapor de agua, con lo cual se produce la condensación y la formación del rocío sobre dicho objeto.

Es muy importante que sepamos diferenciar un meteoro mezcla de rocío y escarcha, el rocío blanco, que es un depósito de gotas de rocío congeladas posteriormente.

II) Escarcha: En este caso el depósito es de cristales de hielo y no de gotas de agua como en el caso anterior. La formación es idéntica a la del rocío pero con temperaturas cercanas o inferiores a los 0 grados centígrados; por tanto, lo veremos principalmente durante el invierno y momentos fríos de otoño y primavera.

III) Helada: Es la congelación directa de la humedad en el suelo, formándose una capa vidriosa y muy resbaladiza. Típica de tiempo muy frío.

IV) Cencellada: Se produce cuando en una zona de niebla con algo de viento, las gotículas se congelan rápidamente al entrar en contacto con los objetos cercanos al suelo, principalmente sobre las superficies expuestas al viento. Si el fenómeno es duradero da la sensación de haber nevado y puede acumularse, sobre todo al lado opuesto de donde sopla el viento, formando en postes de telégrafo o teléfono auténticas "banderolas". Es típico de momentos fríos del otoño y del invierno. También se conoce con el nombre de niebla helada.

Regresa al menú rápido de hidrometeoros


Partículas levantadas de la superficie terrestre por el viento

En este caso se trata de partículas de agua o hielo que debido a la acción del viento son levantadas del suelo.

I) Rociones: Conjunto de gotitas de agua arrancadas por el viento en la superficie de una gran extensión de agua, generalmente en las crestas de las olas, y transportadas a poca distancia en la atmósfera.

II) Ventisca: Conjunto de partículas de nieve levantadas del suelo por un viento bastante fuerte y turbulento. Si la altura a la que son levantadas no es muy grande, se dice que la ventisca es baja; pero si por el contrario son elevadas a grandes alturas, nos encontraremos ante una ventisca alta.


Regresa al menú rápido de hidrometeoros



Partículas que caen libremente en el seno de la atmósfera sin llegar al suelo

En ciertos momentos del año, principalmente en los meses de verano, aunque puede darse en cualquier época del año, la atmósfera que se encuentra por debajo de una masa nubosa está muy seca y cuando se inicia la caída de las gotitas nubosas desde la base de la nube empiezan a evaporarse rápidamente y no tienen tiempo de alcanzar el suelo. Es el meteoro llamado virga y que lo podemos observar a modo de "cortinas" que cuelgan de la base da las nubes.


Regresa al menú rápido de hidrometeoros



Partículas que caen por la atmósfera y alcanzan la superficie terrestre

Es lo que habitualmente llamamos precipitación y son los meteoros formados por partículas líquidas o sólidas, según la temperatura ambiente, que caen desde las nubes y que llegan hasta el suelo con más o menos velocidad.

Según la temperatura ambiente, los más habituales de observar en nuestras latitudes, son:

I) Lluvia: Se produce cuando la precipitación es de partículas líquidas en forma de gotas de agua con un diámetro superior a 0.5 milímetros y que caen con velocidad apreciable, o bien de gotas algo más pequeñas, pero que caen muy dispersas. Las nubes que la producen son los cúmulus, cumulonimbus, nimbostratus y altostratus y pocas veces los stratocúmulus y stratus.

II) Llovizna: Es una precipitación muy uniforme, constituída solamente por gotas de agua con un tamaña inferior a 0.5 milímetros de diámetro y que caen muy próximas unas a otras y con una velocidad de caída muy pequeña. Es típica de los altostratus y en menor medida de los nimbostratus. En España recibe diversos nombres comunes según las distintas regiones, como calabobos -la acepción más generalizada-, orvallo en Galicia y Asturias o sirimiri en el País Vasco.

III) Nevada: Esta precipitación es en forma de cristales de hielo estrellados o ramificados. Procede de las mismas nubes que la lluvia; y si la temperatura del aire no ha descendido mucho, los cristales se sueldan entre sí, formando los copos, que se van depositando sobre el suelo en una capa esponjosa y de espesor creciente; pero a veces al tocar el suelo se funde y no se aglomera, se dice entonces que no "cuaja". Cuando caen mezclados agua y nieve o los cristales de nieve están muy húmedos, se habla de agua nieve.

IV) Granizo: Se produce cuando la precipitación es en forma de partículas de hielo mas o menos redondeadas y con un diámetro comprendido entre 5 a 50 milímetros y a veces mayores -el temible pedrisco-. Sólo cae en forma de chubasco y la única nube que puede producirlo es el cumulonimbus. Suelen ser esféricos y si los cortamos veremos que están constituido por un núcleo de hielo envuelto en capas concéntricas, a modo de una "cebolla" y su formación requiere de mucho tiempo dentro de la nube. Hay pedriscos excepcionales en tamaño que son fatales para la agricultura por los destrozos que producen, pero también el granizo ordinario hace mucho daño por su velocidad de caída actuando como auténticos "perdigones" que acribillan a plantas y árboles.

V) Chubasco: Es la precipitación de partículas líquidas o sólidas, que se caracteriza por un inicio y una finalización brusca, junto con una variación violenta y rápida de la intensidad de la caída. La cantidad de precipitación recogida resulta en la mayoría de los casos muy abundante, siendo la única nube que puede provocarlos el cumulonimbus; aunque a veces, se puede producir de los cúmulus de gran desarrollo vertical. También se le conoce con el nombre de chaparrón o aguacero.

Más raros de observar son:

VI) Nieve granulada: Meteoro formado por gránulos de hielo, blancos y opacos, esféricos la mayoría de las veces, con un diámetro comprendido entre 2 y 5 milímetros. Se produce en situaciones en que las capas medias de la troposfera están especialmente frías, pero con poco contenido de vapor de agua. Podemos considerarla como una precipitación que se encuentra entre la nieve y el granizo, de ahí su nombre.

VII) Cinarra: Precipitación en forma sólida, con el tamaño de los gránulos de hielo que no sobrepasa el milímetro y con una forma alargada. Meteoro muy parecido al anterior pero que se produce en condiciones de menor temperatura y mayor sequedad ambiental.

VIII) Prismas de hielo: Esta precipitación es difícil de observar, ya que se produce en muy pocas ocasiones. Es una caída de cristales de hielo en forma de agujas o de columnas, normalmente muy tenues y que dan la sensación de estar en suspensión en la atmósfera. Este fenómeno se da cuando en toda la troposfera la temperatura es muy baja, provocando que el vapor de agua se congele directamente con mucha facilidad y comience su caída. Debido a esta formación, este meteoro tiene la peculiaridad de poderse producir con el cielo despejado.

IX) Lluvia y llovizna helada: Se produce cuando cualquiera de estos dos tipos de precipitación se congela cuando entra en contacto con la superficie del suelo. La congelación de la gota o gotita, debe ser instantánea, con lo que se forma una película uniforme de hielo sobre la superficie de contacto, lo que concede a este tipo de precipitación un peligro muy grande, provocando caídas a las personas, accidentes de tráfico y roturas generalizadas de los cables del tendido eléctrico.

Volver a la página de fotos de Meteorología Regresa al menú rápido de hidrometeoros

Textos explicativos tomados de los libros:
Introducción a la Meteorología, de Fernando Llorente Martínez, publicado en la revista de internet RAM.
Manual del Observador de Meteorología, de J. M. Jansá Guardiola, publicado por el Ministerio de Trasponte, Turismo y Comunicaciones, 2ª edición, INM 1968.